(PRONUNCIADO EN LA CEREMONIA DE GRADUACIÓN, MAYO DE 2021) Compañeras y compañeros, amigos todos; familiares que los acompañan; maestros de nuestra Universidad; qué gusto estar aquí, muy buenas tardes.

José Vasconcelos, uno de los abogados y educadores más sobresalientes de nuestro país dijo que: “Un libro, como un viaje, se comienza con inquietud y se termina con melancolía”; cuánta razón tenía, este día culminamos, un viaje que se agregará a nuestra biografía académica y personal, un ciclo en nuestras vidas que precisamente inició con inquietud del saber y que hoy solo recordamos con aire melancólico; a este viaje lo llamamos: Licenciatura en Derecho.

El camino, no fue fácil debo decirlo, debo decirlo, muchos lidiábamos con los horarios de nuestros trabajos que se traslapaban con el horario escolar, otros batallábamos con la distancia existente entre nuestra hogar y nuestra querida Universidad; y luego, durante el último año y medio, nos enfrentamos al reto que representó – y sigue representando – la pandemia, que nos hizo distanciarnos físicamente y nos forzó a tomar clases de manera virtual, desde casa; valla reto más grande; pero a pesar de todo, siempre estuvo por encima de toda dificultad el deseo de seguirnos preparando para convertirnos en lo que hoy somos: Abogadas y Abogados, profesionistas de excelencia, formados en el Centro Educativo Morelense UNIM.

Aún recuerdo la primera vez que crucé la puerta de la UNIM, recuerdo la disposición del personal administrativo, que desde el día uno se mostró atento a las necesidades especiales de las y los alumnos; recuerdo la excelencia y el profesionalismo de todos y cada uno de los maestros y maestras que en el aula de clase compartieron con nosotros sus conocimientos y experiencias; y en especial, recuerdo la amabilidad de la queridísima Maestra Paola Cisneros Hidalgo, rectora nuestra institución, que siempre tuvo las puertas abiertas para nosotros sus alumnos y alumnas; a ella que hoy se encuentra en el plano espiritual, siempre la recordaré con infinito aprecio. Querida Maestra Pao, hasta donde te encuentres, te envío un cariñoso abrazo y nuestra gratitud.

Amigas y amigos, siéntanse orgullosos de ustedes, la meta está cumplida, hoy somos Licenciados y Licenciadas en Derecho; siéntanse siempre orgullosos de lo que son, amen y defiendan la profesión que escogimos, y, sobre todo, sean siempre profesionistas con una perspectiva clara, continúen preparándose y cumplan todas sus metas futuras.

¡Muchas felicidades a todos!

Gracias.